26.9.08

Hombres y mitos presenta: Asesinos seriales

Esta publicaciòn anda circulando por los puestos de periòdicos, tiene muchas deficiencias de redacciòn pero vale la pena para coleccionistas



25.9.08

24 CUADROS DE TERROR

Este es el trailer de la nueva pelìcula de Christian González, es sobre un asesino serial.
Cabe recordar que el amigo Christian González, ya tiene un filme sobre asesinos seriales, se trata de "Un instante para morir" con Maribel Guardioa como una bellìsima criminòloga...



Mèxico y sus asesinos seriales en "Reforma"


24.9.08

Matti Juhani Saari

Un estudiante de 22 años asesinó ayer a tiros a diez compañeros y luego se suicidó en un centro de formación profesional de la pequeña localidad de Kauhajoki, al oeste de Finlandia, en la segunda masacre escolar que se produce en este país nórdico en menos de un año.

Según la Policía finlandesa, el asesino, Matti Juhani Saari, acudió al centro, donde estudiaba segundo curso, armado con una pistola automática Walther P22 y tiroteó a un grupo de estudiantes que realizaban un examen: nueve murieron casi en el acto, un décimo falleció más tarde en el hospital y otros dos resultaron heridos.Acto seguido, Saari lanzó varios cócteles molotov en distintos puntos del edificio, con lo que provocó un incendio de grandes proporciones, y se enfrentó a tiros con los agentes de policía que acudieron al lugar de la tragedia.

Disparos. También disparó desde lejos varias veces a un bedel del centro escolar, aunque éste resultó ileso y consiguió huir del edificio.

"Me escapé de las balas corriendo en zig-zag por el pasillo. Es un milagro que esté vivo", confesó el hombre a la agencia finlandesa STT.

Más tarde, el asesino intentó suicidarse disparándose un tiro en la cabeza, aunque no lo consiguió y fue trasladado en estado crítico al Hospital Universitario de Tampere, donde falleció unas horas después.

Matanza. Esta matanza guarda una siniestra similitud con la que protagonizó otro joven finlandés, Pekka-Eric Auvinen, el pasado 7 de noviembre en el instituto Jokela de Tuusula, al sur de un país que cuenta con algo más de cinco millones de habitantes.

Auvinen, de 18 años, asesinó entonces a ocho personas con una pistola antes de suicidarse de un tiro en la cabeza, causando una gran conmoción en Finlandia, el país con el sistema educativo más prestigioso del mundo.

Al igual que Auvinen, antes de cometer su crimen Matti Saari colgó varios vídeos en el portal de internet YouTube, donde aparecía haciendo prácticas de tiro con una pistola automática.Archivos. Además difundió una serie de archivos en formato comprimido llamado "Masacre en Kauhajoki Matti Saari", que contenía fotos, vídeos y mensajes violentos.En uno de estos vídeos, grabado sólo unas horas antes de la masacre, Saari aparecía disparando su pistola en un campo de tiro antes de dirigirse a la cámara para decir "tú serás el siguiente en morir".

En su perfil de usuario se describía a sí mismo como un joven interesado en "ordenadores, armas, sexo y cervezas", y afirmaba que le gustaban las películas de horror y violencia explícita como "Saw" y "The Grudge" (El Grito).

También recogía la letra de una canción del grupo electrónico alemán Wumpscut, del que tomaba su nombre de usuario, llamada "War" (Guerra).

23.9.08

El espectàculo del Automovil Gris



19.9.08

Venden en web artículos de asesinos seriales

Ofertan uñas, pinturas, papeles, fotografías de criminales de alto perfil; atesoran fanáticos de las estrellas pop del pabellón de la muerte

Brookey Lee West metió a su madre muerta en un bote de basura y la dejó en una bodega hasta que sus restos fueron descubiertos por alguien que no pudo soportar el olor. West negó haber matado a su madre, pero el jurado no le creyó: fue sentenciada a cadena perpetua por asesinato.
¿Le interesaría comprar algunos pedazos de las uñas de Brookey?West es parte de la espeluznante lista de asesinos cuyas pertenencias se están volviendo actualmente objetos de colección.

Criminales convictos cuyos objetos personales -su arte, sus cartas, fotografías, recortes de uñas- son atesorados por fanáticos que veneran a las "estrellas pop" del pabellón de la muerte. Es la nueva industria de los recuerdos y objetos personales de asesinos.

Los recortes de uñas de la mano derecha de West se están vendiendo a 19.99 dólares (¡sin costo de envío a todo el mundo!) en un sitio web que también vende las obras de arte de West: prisonboundserialkillers.com.

El dueño del sitio, un tipo llamado Randall, de Massachusetts, exhorta a sus clientes a "tratar de obtener los mejores precios". También les recuerda ser "malvados las 24 horas de los siete días de la semana".

Randall comenzó a vender los artículos de West aproximadeamente hace ocho meses y es uno de los primeros coleccionistas en introducirla en el mercado de los recuerdos y objetos personales de asesinos. El comerciante señaló que vendió un dibujo de Jesús realizado por West en 175 dólares, y añadió que poca gente ha preguntado por las uñas.

Al igual que la mayoría de los vendedores, obtiene su mercancía mediante correspondencia con el asesino. Algunas personas piden productos específicos, pero Randall nunca le dijo nada a West, pensó que ella sabría lo que le interesaría. Le envió los recortes de sus uñas sin que él se los pidiera.

También le envió una pintura de tres niñas, y la playera blanca que utilizó mientras la hacía. En la playera escribió: "no hay nada como una cómoda playera de algodón. Le corté las mangas y la utilicé para un proyecto de arte. Esta playera la utilicé cuando terminé de pintar a las tres chicas". Luego la firmó y le puso la fecha, como a cualquier obra de arte.

La playera es parte de la colección privada de Randall.La presencia de West en la web no representa la primera vez en que un asesino es objeto de comercio. Otro sitio web de recuerdos y objetos personales de asesinos tenía a la venta fotografías de Michael Strohmeyer, arrestado hace 10 años por violar y asesinar a una niña de siete años en el baño de un casino en Primm, Nevada.

Randall también vende cosas de Strohmeyer; tiene un pedazo de papel de la cárcel con la firma de Strohmeyer y lo vende a 3.99 dólares. Y a pesar de lo que se podría pensar, Randall no siente ningún tipo de remordimiento por su extraño pasatiempo.

"No me siento mal, no creo que esté haciendo nada malo", dijo. "Algunas personas coleccionan tarjetas de béisbol. A mi me gusta coleccionar material de casos de alto perfil".

Cuando el departamento de Correccionales de Nevada examinó este año el sitio que vende los artículos de Strohmeyer, los oficiales determinaron que no podían hacer nada para impedirlo. Algunos estados han aprobado leyes para prohibir la venta de artículos de ese tipo, pero Nevada no.

Y la ley original de "el hijo de Sam", diseñada para evitar que los asesinos saquen provecho de vender sus historias, fue anulada hace años, luego de que la Suprema Corte determinara que era una violación a las protecciones de libertad de expresión.

Randall comenzó a comunicarse con West desde hace dos años. En ese tiempo han llegado a conocerse, y West siempre ha mantenido su inocencia. Siempre ha insistido en que no asesinó a su madre. ¿Pero la metió dentro de un bote de basura? Seguro, ni siquiera su abogado defensor lo negó. ¿Pero acabó con la vida de su madre? No.

Claro, la inocencia reduciría el valor de la obra de West. Por lo que cuando se le pregunta a Randall si cree en Brookey, su respuesta es muy simple: "no, para nada". (Traducción: Mariana Toledo)

Las Vegas Sun
El Universal
La Vegas, EU.
Jueves 18 de septiembre de 2008

13.9.08

Novela del narco sin nota roja

El vuelo, de Sergio González Rodríguez
La violencia, el poder, la magia o la técnica se entrelazan a lo largo de la obra.

Las páginas de los periódicos cuentan historias del narcotráfico que ni las imaginaciones más desaforadas hubiesen podido ofrecer como ficción; lo mismo pasa en la radio, en la televisión o en las páginas de internet, hasta llegar a los libros de ficción, donde se ha constituido el subgénero de literatura del narco.

Sergio González Rodríguez participa en ese fenómeno… aunque también busca alejarse: su más reciente novela, El vuelo (Literatura Mondadori, 2008), cuenta una historia acerca del narcotráfico en México, pero sin que sea el tema dominante de su narración.

“Cuando la literatura mexicana, y en general en la narrativa latinoamericana, le entra a un tema como la violencia o el narcotráfico a estas alturas, enfrenta el problema de cómo entrarle a lo obvio y yo quería desplazar esa obviedad para entrar en una reflexión que primero creara una distancia temporal y un mundo imaginario, en una ciudad aparentemente cercana, pero que ya no existe como tal.”

Su idea fue desplazar la narrativa hacia formas nuevas de narrar lo que aparentemente es muy obvio, a través de formas de mayor complejidad: darle a un relato que tiene las características de lo aparentemente inmediato, una dimensión más amplia, más universal.

El folclor, el habla, la nota roja del narcotráfico se convierten en anécdotas de lo inmediato, y ya no cuentan el trasfondo de una realidad que “ha cambiado vertiginosamente, porque los mismos estereotipos de la subcultura del narcotráfico están cumpliendo un ciclo y las historias que la cuentan se refieren a una realidad ya extinta”.

“En la novela lo más importante es lo que no aparece en el primer momento, sino surge de un modo sutil de manera paralela a la línea anecdótica de la historia y es ahí donde la reflexión se abre.

“Me interesa llevar al lector a estos fenómenos extremos desde otro punto de vista, más allá de lo llamativo, del impacto sensacionalista, incluso de la posible sublimación. Hay formas de aproximarse a ellas de otra forma, mediante un relato que narra algo por afuera.”

Una de las apuestas de Sergio González Rodríguez, parte de sus obsesiones literarias, fue contar una realidad como la del narco mediante estructuras más cercanas a la metafísica: el sueño, la amnesia, como la atmósfera de realidades paralelas, superiores o alternas que sirven para explicar lo inmediato.

“Me interesaba que el personaje tuviera una relación con dos planos opuestos, y que apareciera un fenómeno que me interesa también: la desmemoria, en especial porque en un país en el que tenemos una tremenda falta de memoria, habría que ahondar un poco en el estudio de esta pulsión cultural que está en muchas personas.”

A esa reflexión, habría que sumar la importancia que para Sergio González Rodríguez tienen los libros que dejan zonas abiertas, en blanco, donde sólo se puede conjeturar lo que sucedió, lo cual le permite una mayor participación al lector.

La violencia, el poder, la magia o la técnica, es lo que entrelaza muchos de los hilos narrativos de la novela, pero también la reflexión sobre el poder, en especial “aquel que nos trasciende y está más allá de lo que nosotros podemos comprender”.

5.9.08

Albert de Salvo en DVD

Les presento las 3 pelìculas realizadas alrededor de la figura de el estranguldor de Boston, aunque hay que decir que a la fecha se tienen serias dudas sobre si De Salvo en realidad era es famoso estrangulador


4.9.08

Sentencian a asesino serial de homosexuales


Luego de 10 meses en prisión, Miguel Ángel Amaro fue sentenciado a 34 años de cárcel, en la primera de una serie de condenas que le faltan por recibir por su presunta responsabilidad en el asesinato de al menos cuatro crímenes cometidos contra homosexuales.

El juez primero de lo penal lo encontró responsable de homicidio calificado en el caso de Jorge Ernesto, un catedrático del Instituto Tecnológico Regional de Colima, cuyo cadáver fue encontrado en enero de 2001 en su domicilio particular, con huellas de asfixia por estrangulamiento.


Tanto el cuerpo de Jorge Ernesto como los de otras tres víctimas, localizadas en diferentes fechas y lugares, se encontraron atados de pies y manos y exhibían una cuerda enredada alrededor del cuello.


Originario de Veracruz, El Chacal estuvo prófugo durante casi siete años, hasta que a finales de octubre de 2007 fue detenido en un poblado de Sinaloa, después que su pareja lo denunció por violencia intrafamiliar.


Según la declaración ministerial de Amaro Huerta, dada a conocer por la Procuraduría local, después de los cuatro homicidios se trasladó a otras entidades de la República y radicó algunos años en Estados Unidos, desde donde se mantenía informado a través de Internet sobre las reacciones generadas por sus crímenes.


Reveló que la primera ocasión que visitó Colima fue en el 2000 y lo hizo con la intención de asaltar a personas que conocía de manera fortuita, en particular hombres. Su modus operandi era el siguiente: contactaba a sus víctimas durante las noches en el jardín Núñez, conocido sitio de ligue de la comunidad gay de la ciudad.


En el caso por el que fue sentenciado, Amaro Huerta narró que se encontraba sentado en una banca de ese jardín, lugar hasta donde se acercó Jorge Ernesto. Comenzaron entonces a platicar y después de un rato éste lo invitó a su casa a tomar una copa y se fueron a bordo de un VW rojo sedán, propiedad de la víctima.


Ya en el domicilio, El Chacal sometió a Jorge Ernesto, lo amordazó y amarró de pies y manos. Después le exigió su número de identificación para retirar dinero del cajero automático.Sin embargo, como su víctima se resistiera, le aplicó un torniquete en el cuello hasta que dio la información. Luego tomó las tarjetas de crédito y se fue a retirar dinero en efectivo.


Más tarde regresó y, al ver que su víctima no reaccionaba, tomó las llaves del automóvil y huyó hacia Veracruz, donde varios días después vendió el vehículo en 5 mil pesos.


Previo a este homicidio, El Chacal ya había asaltado al menos a otros tres hombres, entre ellos Arnoldo, un estudiante que murió en condiciones similares a las de Jorge Ernesto, sólo que su cuerpo fue abandonado en un hotel.Y en mayo del 2001 se descubrió el cuerpo de Luis Eduardo, un empresario que fue ‘encajuelado’ en su propio automóvil, estacionado en una calle céntrica de la ciudad de Colima.


El cuarto asesinato fue cometido a fines de ese mismo mes, aunque ahora la víctima era un empleado del gobierno estatal, cuyos restos fueron hallados en la Barranca del Muerto, a un costado de la carretera Colima-Guadalajara.Después de recibir su primera condena, Amaro Huerta aguarda en el Centro de Readaptación Social de Colima las otras sentencias.