¡ Esclavos !
Las autoridades judiciales desmembraron ayer una banda dedicada al delito de la trata de personas, en los hechos fueron capturados 23 probables integrantes y se liberó a 107 víctimas, originarios, tanto del Distrito Federal como de 12 entidades, quienes de acuerdo con las investigaciones, fueron privadas de su libertad y obligados a trabajar largas jornadas en el interior de un centro de rehabilitación para alcohólicos y drogadictos, ubicado en la Delegación Iztapalapa.
Al respecto, el Procurador capitalino Miguel Angel Mancera Espinosa, informó que las víctimas vivían en condiciones infrahumanas, insalubres, hacinadas y en condiciones extremas de maltrato y explotación sexual, por lo cual tras ser rescatadas, varias fueron trasladadas a hospitales por presentar desnutrición, deshidratación, laceraciones, infecciones cutáneas y una de ellas fracturas.
Señaló que el hallazgo fue realizado por elementos de la Fiscalía Especial de Investigación para Secuestros "Fuerza Antisecuestro" (FAS) operada por la Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Centrales, en coordinación con las autoridades de la Central de Abasto (Ceda).
Asi mismo, las autoridades de la FAS, señalaron que ese inmueble estaba en el número 157 de Avenida Cuauhtémoc, Colonia Jardines de San Lorenzo, con razón social Instituto de Rehabilitación de Alcohol y Drogadicción, Hospital Santo Tomás, Los Elegidos de Dios, de acuerdo con los detenidos, operaba desde hace más de 8 años.
Con base en una denuncia por desaparición de persona, presentada en el Centro de Atención de Personas Extraviadas y Ausentes (CAPEA), la FAS comenzó las investigaciones que culminaron con ese lugar, donde se maquilaban bolsas de centros comerciales y pinzas para colgar ropa, cuyas ganancias se repartían únicamente entre los ahora detenidos.
En esa denuncia, la víctima dijo que fue levantado a las 22:30 horas cuando descargaba un camión de elotes en la Ceda, varios sujetos lo subieron por la fuerza a una combi roja, donde viajaban otras personas en evidente estado de intoxicación.
Precisó que el conductor era apodado "El Tato", ahora sabe es Francisco Javier Rosales García, de 36 años, quien llevaba en total 13 hombres plagiados.
Por la gravedad del caso, el CAPEA solicitó la intervención de la Fiscalía Especial de Investigación para Secuestros, cuyos elementos iniciaron las pesquisas hasta establecer la explotación laboral, sexual y la privación ilegal de la libertad de 107 víctimas, cuyas edades oscilan de 14 a 70 años. (La Prensa)
Rescata la PGJ a 107 “esclavos (Universal)
La Procuraduría capitalina detuvo ayer a 23 individuos vinculados con el delito de trata de personas, pero además investiga a patrulleros de la zona de la Central de Abasto que en días anteriores detuvieron a algunas de las víctimas con el objetivo de entregarlos al Instituto de Rehabilitación de Alcoholismo y Drogadicción Hospital Santo Tomás “Los elegidos de Dios”.
A las siete de la mañana de ayer, la Fiscalía Antisecuestros arribó al número 157 de la avenida Cuauhtémoc en la colonia Lomas de San Lorenzo, Iztapalapa, donde sorprendió al grupo de presuntos responsables, quienes custodiaban a los afectados.
El inmueble —del cual se iniciará un proceso de extinción de dominio— era una fortaleza para impedir la salida de los cautivos: con enmallados, ventanas con protecciones y puertas de rejas.
El supuesto centro de tratamiento cerraba con cadenas todos los accesos y tenía literas de fierro, similares a las de los reclusorios, para mantener allí a hombres y mujeres en condiciones de insalubridad y maltrato físico y sicológico.
Se trata en su gran mayoría de indígenas provenientes de Veracruz, estado de México, Oaxaca, Puebla, Michoacán, Chiapas y el Distrito Federal, que eran secuestrados en plena vía pública por el grupo delictivo.
Muchos ni siquiera hablan español y eran alimentados día a día con caldo de pollo y verduras en estado de descomposición, fue la narración de uno de las víctimas que fue liberada tras casi medio año de estar en el lugar.
Luis, un joven de la comunidad mixe de Oaxaca, fue quien descubrió la red de tratantes, quien narró que al laborar como cargador en la Central de Abasto, fue detenido por policías preventivos que lo subieron a una patrulla y llevaron al mencionado centro, según fuentes de la dependencia.
Hacían bolsas y pinzas
El joven dijo que vio a por lo menos 300 personas que junto con él laboraban en ese lugar desde las ocho de la mañana y hasta la medianoche, confeccionando bolsas de una prestigiada tienda departamental y pinzas para tendederos. No recibían ninguna paga, y algunos llevaban más de medio año en el sitio.
La mayoría no eran adictos, y sólo unos cuantos fueron internados por sus propios familiares. La dependencia aseguró que algunos eran explotados sexualmente, sobre todo las mujeres.
La dependencia detuvo al administrador del lugar, José Antonio Villar Ramos, así como a otros de sus presuntos cómplices. Las pesquisas continuarán en el estado de México, donde hay otro inmueble propiedad de la mencionada razón social, y donde se presume estarían las otras 200 personas que falta por liberar. Los detenidos alcanzarían una penalidad de 10 a 15 años, y se duplicará en los casos de menores de edad; serán arraigados para conocer más sobre su modo de operar.
Dicho instituto funcionaba desde hace más de 8 años.
En conferencia de prensa, el titular de la PGJDF, Miguel Ángel Mancera, explicó que los detenidos interceptaban a sus víctimas, principalmente cerca de la Central de Abasto, para luego trasladarlas al “centro de rehabilitación”, donde vivían en condiciones infrahumanas, insalubres y hacinadas. Varias ya fueron trasladadas a hospitales por evidentes grados de desnutrición, deshidratación, laceraciones, infecciones y fracturas, entre otros padecimientos. La mayoría de los retenidos eran en hombres de entre 14 y 70 años.
Dijo que se verificará si en la operación del lugar está implicado algún grupo religioso, pues varias rescatadas muestran un grado de adoctrinamiento.
Suman 25 detenidos por red de esclavizadores
En las últimas horas la policía judicial capitalina detuvo a dos personas más relacionadas con el centro de rehabilitación donde se mantenían esclavizadas a 107 personas por lo que suman ya 25 los detenidos por estos hechos.
Autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) confirmaron la detención de dos sujetos más, cuyos nombres no se han precisado, pero que ya fueron trasladados a la Fiscalía de Secuestros al igual que el resto de los aprehendidos.
El Ministerio Público continúa recabando la declaración de los probables responsables, y en las próximas horas solicitará una orden de arraigo en contra de todos ellos, por los delitos de trata de personas en su modalidad de explotación laboral y sexual, privación ilegal de la libertad, y lo que resulte.
Entre los detenidos se encuentra José Antonio Villa Ramos, quien fungía como administrador del `Hospital Santo Tomás, Los Elegidos de Dios` donde ocurrían los hechos; así como Francisco Javier Rosales García alias El Tato, quien interceptaba a las potenciales víctimas en inmediaciones de la Central de Abasto.
En tanto, la Subprocuraduría de Atención especial a Víctimas de la PGJDF continúa evaluando las lesiones que presentan las personas rescatadas, la mayoría de ellos provenientes de provincia, y algunos de los cuales no hablan español.
De manera paralela, la Procuraduría capitalina iniciará a través de la Fiscalía de Procedimientos de lo Civil, la integración del expediente relacionado con este centro de adicciones y solicitará que se le aplique la extinción de dominio, bajo la hipótesis del delito de trata de personas.
Las instalaciones del `Hospital Santo Tomás, Los Elegidos de Dios`, que se ubican en el número 157 de Avenida Chapultepec, colonia Jardines de San Lorenzo, delegación Iztapalapa, se encuentran clausuradas y resguardadas por la Policía Judicial.
CDHDF alertó de centro de reclusión desde mayo
La Comisión informó a la PGJDF sobre el levantamiento de personas de la calle y su remisión a centro de rehabilitación social donde ayer fueron liberadas 107 víctimas de trata
El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Luis González Plascencia, dio a conocer que en mayo pasado informó a la Procuraduría capitalina sobre una queja que refería que personas en situación de calle eran llevadas al centro de rehabilitación social donde ayer fueron liberadas 107 víctimas de trata.
El funcionario mencionó que la queja fue iniciada por la organización civil El Caracol, que se dedica a ayudar a poblaciones en situación de calle, y en la cual "se denunciaba el levantamiento de personas que eran llevadas a ese centro de rehabilitación (Hospital santo Tomás, los elegidos de Dios)".
Además, en la recomendación 23-2009 la CDHDF dio a conocer de la existencia de dicho lugar.
La recomendación dirigida a las autoridades de las delegaciones Venustiano Carranza y Cuauhtémoc, así como a la secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, fue por el tema de limpieza social, en los que se enmarcan este tipo de operativos en los que se levantaba a personas en situación de calle para llevarlos a este albergue.
También, el organismo defensor de los derechos humanos investiga otra queja presentada por una persona que fue llevada a ese lugar, quien hizo saber que fue detenido de manera injustificada.
González Plascencia puntualizó que patrulleros de la SSPDF escoltaban a la camioneta que había los levantamientos de algunas de las personas que ayer fueron liberadas al conocerse qiue eran obligadas a trabajar en condiciones de esclavitud.
Al respecto, el Procurador capitalino Miguel Angel Mancera Espinosa, informó que las víctimas vivían en condiciones infrahumanas, insalubres, hacinadas y en condiciones extremas de maltrato y explotación sexual, por lo cual tras ser rescatadas, varias fueron trasladadas a hospitales por presentar desnutrición, deshidratación, laceraciones, infecciones cutáneas y una de ellas fracturas.
Señaló que el hallazgo fue realizado por elementos de la Fiscalía Especial de Investigación para Secuestros "Fuerza Antisecuestro" (FAS) operada por la Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Centrales, en coordinación con las autoridades de la Central de Abasto (Ceda).
Asi mismo, las autoridades de la FAS, señalaron que ese inmueble estaba en el número 157 de Avenida Cuauhtémoc, Colonia Jardines de San Lorenzo, con razón social Instituto de Rehabilitación de Alcohol y Drogadicción, Hospital Santo Tomás, Los Elegidos de Dios, de acuerdo con los detenidos, operaba desde hace más de 8 años.
Con base en una denuncia por desaparición de persona, presentada en el Centro de Atención de Personas Extraviadas y Ausentes (CAPEA), la FAS comenzó las investigaciones que culminaron con ese lugar, donde se maquilaban bolsas de centros comerciales y pinzas para colgar ropa, cuyas ganancias se repartían únicamente entre los ahora detenidos.
En esa denuncia, la víctima dijo que fue levantado a las 22:30 horas cuando descargaba un camión de elotes en la Ceda, varios sujetos lo subieron por la fuerza a una combi roja, donde viajaban otras personas en evidente estado de intoxicación.
Precisó que el conductor era apodado "El Tato", ahora sabe es Francisco Javier Rosales García, de 36 años, quien llevaba en total 13 hombres plagiados.
Por la gravedad del caso, el CAPEA solicitó la intervención de la Fiscalía Especial de Investigación para Secuestros, cuyos elementos iniciaron las pesquisas hasta establecer la explotación laboral, sexual y la privación ilegal de la libertad de 107 víctimas, cuyas edades oscilan de 14 a 70 años. (La Prensa)
Rescata la PGJ a 107 “esclavos (Universal)
La Procuraduría capitalina detuvo ayer a 23 individuos vinculados con el delito de trata de personas, pero además investiga a patrulleros de la zona de la Central de Abasto que en días anteriores detuvieron a algunas de las víctimas con el objetivo de entregarlos al Instituto de Rehabilitación de Alcoholismo y Drogadicción Hospital Santo Tomás “Los elegidos de Dios”.
A las siete de la mañana de ayer, la Fiscalía Antisecuestros arribó al número 157 de la avenida Cuauhtémoc en la colonia Lomas de San Lorenzo, Iztapalapa, donde sorprendió al grupo de presuntos responsables, quienes custodiaban a los afectados.
El inmueble —del cual se iniciará un proceso de extinción de dominio— era una fortaleza para impedir la salida de los cautivos: con enmallados, ventanas con protecciones y puertas de rejas.
El supuesto centro de tratamiento cerraba con cadenas todos los accesos y tenía literas de fierro, similares a las de los reclusorios, para mantener allí a hombres y mujeres en condiciones de insalubridad y maltrato físico y sicológico.
Se trata en su gran mayoría de indígenas provenientes de Veracruz, estado de México, Oaxaca, Puebla, Michoacán, Chiapas y el Distrito Federal, que eran secuestrados en plena vía pública por el grupo delictivo.
Muchos ni siquiera hablan español y eran alimentados día a día con caldo de pollo y verduras en estado de descomposición, fue la narración de uno de las víctimas que fue liberada tras casi medio año de estar en el lugar.
Luis, un joven de la comunidad mixe de Oaxaca, fue quien descubrió la red de tratantes, quien narró que al laborar como cargador en la Central de Abasto, fue detenido por policías preventivos que lo subieron a una patrulla y llevaron al mencionado centro, según fuentes de la dependencia.
Hacían bolsas y pinzas
El joven dijo que vio a por lo menos 300 personas que junto con él laboraban en ese lugar desde las ocho de la mañana y hasta la medianoche, confeccionando bolsas de una prestigiada tienda departamental y pinzas para tendederos. No recibían ninguna paga, y algunos llevaban más de medio año en el sitio.
La mayoría no eran adictos, y sólo unos cuantos fueron internados por sus propios familiares. La dependencia aseguró que algunos eran explotados sexualmente, sobre todo las mujeres.
La dependencia detuvo al administrador del lugar, José Antonio Villar Ramos, así como a otros de sus presuntos cómplices. Las pesquisas continuarán en el estado de México, donde hay otro inmueble propiedad de la mencionada razón social, y donde se presume estarían las otras 200 personas que falta por liberar. Los detenidos alcanzarían una penalidad de 10 a 15 años, y se duplicará en los casos de menores de edad; serán arraigados para conocer más sobre su modo de operar.
Dicho instituto funcionaba desde hace más de 8 años.
En conferencia de prensa, el titular de la PGJDF, Miguel Ángel Mancera, explicó que los detenidos interceptaban a sus víctimas, principalmente cerca de la Central de Abasto, para luego trasladarlas al “centro de rehabilitación”, donde vivían en condiciones infrahumanas, insalubres y hacinadas. Varias ya fueron trasladadas a hospitales por evidentes grados de desnutrición, deshidratación, laceraciones, infecciones y fracturas, entre otros padecimientos. La mayoría de los retenidos eran en hombres de entre 14 y 70 años.
Dijo que se verificará si en la operación del lugar está implicado algún grupo religioso, pues varias rescatadas muestran un grado de adoctrinamiento.
Suman 25 detenidos por red de esclavizadores
En las últimas horas la policía judicial capitalina detuvo a dos personas más relacionadas con el centro de rehabilitación donde se mantenían esclavizadas a 107 personas por lo que suman ya 25 los detenidos por estos hechos.
Autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) confirmaron la detención de dos sujetos más, cuyos nombres no se han precisado, pero que ya fueron trasladados a la Fiscalía de Secuestros al igual que el resto de los aprehendidos.
El Ministerio Público continúa recabando la declaración de los probables responsables, y en las próximas horas solicitará una orden de arraigo en contra de todos ellos, por los delitos de trata de personas en su modalidad de explotación laboral y sexual, privación ilegal de la libertad, y lo que resulte.
Entre los detenidos se encuentra José Antonio Villa Ramos, quien fungía como administrador del `Hospital Santo Tomás, Los Elegidos de Dios` donde ocurrían los hechos; así como Francisco Javier Rosales García alias El Tato, quien interceptaba a las potenciales víctimas en inmediaciones de la Central de Abasto.
En tanto, la Subprocuraduría de Atención especial a Víctimas de la PGJDF continúa evaluando las lesiones que presentan las personas rescatadas, la mayoría de ellos provenientes de provincia, y algunos de los cuales no hablan español.
De manera paralela, la Procuraduría capitalina iniciará a través de la Fiscalía de Procedimientos de lo Civil, la integración del expediente relacionado con este centro de adicciones y solicitará que se le aplique la extinción de dominio, bajo la hipótesis del delito de trata de personas.
Las instalaciones del `Hospital Santo Tomás, Los Elegidos de Dios`, que se ubican en el número 157 de Avenida Chapultepec, colonia Jardines de San Lorenzo, delegación Iztapalapa, se encuentran clausuradas y resguardadas por la Policía Judicial.
CDHDF alertó de centro de reclusión desde mayo
La Comisión informó a la PGJDF sobre el levantamiento de personas de la calle y su remisión a centro de rehabilitación social donde ayer fueron liberadas 107 víctimas de trata
El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Luis González Plascencia, dio a conocer que en mayo pasado informó a la Procuraduría capitalina sobre una queja que refería que personas en situación de calle eran llevadas al centro de rehabilitación social donde ayer fueron liberadas 107 víctimas de trata.
El funcionario mencionó que la queja fue iniciada por la organización civil El Caracol, que se dedica a ayudar a poblaciones en situación de calle, y en la cual "se denunciaba el levantamiento de personas que eran llevadas a ese centro de rehabilitación (Hospital santo Tomás, los elegidos de Dios)".
Además, en la recomendación 23-2009 la CDHDF dio a conocer de la existencia de dicho lugar.
La recomendación dirigida a las autoridades de las delegaciones Venustiano Carranza y Cuauhtémoc, así como a la secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, fue por el tema de limpieza social, en los que se enmarcan este tipo de operativos en los que se levantaba a personas en situación de calle para llevarlos a este albergue.
También, el organismo defensor de los derechos humanos investiga otra queja presentada por una persona que fue llevada a ese lugar, quien hizo saber que fue detenido de manera injustificada.
González Plascencia puntualizó que patrulleros de la SSPDF escoltaban a la camioneta que había los levantamientos de algunas de las personas que ayer fueron liberadas al conocerse qiue eran obligadas a trabajar en condiciones de esclavitud.
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